Para conocer más sobre las maravillas naturales de un paraíso como Acapulco, visita el Jardín Botánico, ubicado a un costado de la Sierra a una altitud de entre 200 a 400 metros sobre el nivel del mar.

Dentro de sus 6 hectáreas de selva subtropical, podrás hacer un paseo mientras exploras la flora nativa e introducida de clima tropical subhúmedo; también sus árboles y arbustos maderables finos, como el Palo Morado Peltogyne mexicana, que está en vías de extinción.

El Jardín Botánico cuenta con senderos cómodos desde donde se pueden observar y conocer de sus arroyos, plantas nativas y una colección de arbustos, árboles, áreas de cactáceas, aráceas, palmeras y cycas, heliconias, jengibres, helechos, entre otros. Cada área cuenta con letreros descriptivos que se han colocado a lo largo del jardín para sus visitantes.

En los recorridos también podrás ver fauna de la región, como aves y reptiles carcaterísticos de la zona que son de gran ayuda al mantenimiento del ecosistema.

Además de gozar de la naturaleza, se puede tomar un refrigerio en el centro botánico, adquirir alguna artesanía realizada con materiales naturales dentro de la tienda, conocer el anfiteatro donde suelen llevarse a cabo conciertos y conferencias; y caminar hasta el mirador, enclavado a la sombra de una majestuosa roca.

Planea tu visita a este Jardín en el que suelen darse visitas guiadas, se imparten cursos y talleres tanto para niños como adultos, además de programas especiales para convenciones.